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Śrīmad-bhāgavatam 4.21.25

Texto

tat prajā bhartṛ-piṇḍārthaṁ
svārtham evānasūyavaḥ
kurutādhokṣaja-dhiyas
tarhi me ’nugrahaḥ kṛtaḥ

Palabra por palabra

tat — así pues; prajāḥ — mis queridos súbitos; bhartṛ — del amo; piṇḍa-artham — bien después de la muerte; sva-artham — interés personal; eva — ciertamente; anasūyavaḥ — sin ser envidiosos; kuruta — realicen; adhokṣaja — la Suprema Personalidad de Dios; dhiyaḥ — pensando en Él; tarhi — por lo tanto; me — a mí; anugrahaḥ — misericordia; kṛtaḥ — hecha.

Traducción

Pṛthu Mahārāja continuó: Así pues, mis queridos súbditos, por el bien de su rey después de su muerte, deben realizar sus deberes como es debido, conforme a las posiciones de varṇa y āśrama que ocupen, y en su corazón siempre deben llevar el pensamiento de la Suprema Personalidad de Dios. De esta forma, velarán por sus propios intereses, y serán misericordiosos con su rey, considerando su bienestar después de la muerte.

Significado

Las palabras adhokṣaja-dhiyaḥ, que significan «conciencia de Kṛṣṇa», son muy importantes en este verso. Tanto el rey como los súbitos deber ser conscientes de Kṛṣṇa; de lo contrario, uno y otros se condenarán a especies inferiores de vida después de morir. Un gobierno responsable debe eseñar el proceso de conciencia de Kṛṣṇa con gran vigor, para el beneficio de todos. Sin ser conscientes de Kṛṣṇa, ni el estado ni los habitantes del estado pueden ser responsables. Por esa razón, Pṛthu Mahārāja rogó especialmente a sus súbditos que fuesen conscientes de Kṛṣṇa en sus obras; él, por su parte, estaba muy deseoso de enseñarles a ser conscientes de Kṛṣṇa. En el Bhagavad-gītā (9.27) se resume el proceso de conciencia de Kṛṣṇa:

yat karoṣi yad aśnāsi
yaj juhoṣi dadāsi yat
yat tapasyasi kaunteya
tat kuruṣva mad-arpaṇam

«Todo lo que hagas, todo lo que comas, todo lo que des como caridad, y todas las penitencias que realices, debes hacerlo siendo consciente de Kṛṣṇa, es decir, para satisfacción de la Suprema Personalidad de Dios». Si todos los habitantes del estado, y entre ellos los sirvientes del gobierno, son educados en las técnicas de la vida espiritual, no se verán enredados en los castigos que las estrictas leyes de la naturaleza material imponen a todos.