Skip to main content

Śrīmad-bhāgavatam 4.14.14

Texto

munaya ūcuḥ
nṛpa-varya nibodhaitad
yat te vijñāpayāma bhoḥ
āyuḥ-śrī-bala-kīrtīnāṁ
tava tāta vivardhanam

Palabra por palabra

munayaḥ ūcuḥ — los grandes sabios dijeron; nṛpa-varya — ¡oh, el mejor de los reyes!; nibodha — ten la bondad de tratar de entender; etat — esto; yat — que; te — a ti; vijñāpayāma — vamos a instruir; bhoḥ — ¡oh, rey!; āyuḥ — duración de la vida; śrī — opulencias; bala — fuerza; kīrtīnām — buena reputación; tava — tuyas; tāta — querido hijo; vivardhanam — que aumentarán.

Traducción

Los grandes sabios dijeron: Querido rey, hemos venido para darte buenos consejos. Ten la bondad de escucharnos con mucha atención. Con ello verás aumentar la duración de tu vida, tu opulencia, tu fuerza y tu fama.

Significado

La civilización védica establece que, en una monarquía, el rey recibe consejos de los sabios y personas santas. Con sus consejos, el rey puede llegar a ser el poder ejecutivo indiscutible, y en su reino todos vivirán felices, prósperos y pacíficos. Al aceptar las instrucciones de las grandes personalidades santas, los grandes reyes manifestaban un gran sentido de la responsabilidad. Solían aceptar instrucciones de grandes sabios como Parāśara, Vyāsadeva, Nārada, Devala y Asita. En otras palabras, para ejercer el poder de la monarquía, aceptaban ante todo la autoridad de las personas santas. Por desdicha, en la era actual, la era de Kali, los jefes de los gobiernos no siguen las instrucciones de las personas santas; por esa razón, ni los ciudadanos ni los gobernantes son felices. La duración de sus vidas se ha reducido, casi nadie cuenta con medios suficientes, y no tienen ni fuerza física ni poder espiritual. Si quieren ser felices y gozar de prosperidad en esta era democrática, los ciudadanos no deben elegir a necios y sinvergüenzas que no respetan a las personas santas.