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Ilustración 40

En el despejado cielo de otoño las estrellas centelleantes parecen brillar más y más, igual que un trascendentalista con una clara visión del propósito de los Vedas.

Se dice que el significado de los Vedas se vuelve claro para alguien que no solamente es un devoto sincero del Señor, sino también un servidor sincero del maestro espiritual. El maestro espiritual conoce el propósito de los Vedas, lo practica personalmente y enseña al discípulo acerca de la verdadera luz de los Vedas. El maestro espiritual supremo, el Señor Śrī Kṛṣṇa, nos enseña la importancia de los Vedas en el siguiente verso del Bhagavad-gītā (15.16)

dvāv imau puruṣau loke
kṣaraś cākṣara eva ca
kṣaraḥ sarvāṇi bhūtāni
kūṭa-stho 'kṣara ucyate

El Señor dice que en los Vedas se menciona que existen dos clases de seres vivientes, el falible y el infalible. Aquellos seres vivientes que están materialmente enjaulados son todos falibles, mientras que aquellos que no están condicionados y se hallan situados eternamente en la esfera espiritual se llaman akṣara, o infalible. Entonces el Señor dice,

uttamaḥ puruṣas tv anyaḥ
paramātmety udāhṛtaḥ
yo loka-trayam āviśya
bibharty avyaya īśvaraḥ

"Aparte de estos innumerables seres vivientes falibles e infalibles, existe otra personalidad superior conocida como Paramātma. Él penetra los tres mundos y existe como el controlador supremo."

yasmāt kṣaram atīto 'ham
akṣarād api cottamaḥ
ato 'smi loke vede ca
prathitaḥ puruṣottamaḥ

"Y debido a que Yo (el Señor Śrī Kṛṣṇa) Soy trascendental a todos ellos, aun a aquellos que son infalibles, Soy conocido en todos los Vedas e historias ( los Purāṇas, el Mahābhārata, el Rāmāyaṇa, etc.) como la Suprema Personalidad de Dios Absoluta".(Bg. 15.17 - 18)

El significado de los Vedas se explica aun más claramente en el Śrīmad Bhāgavatam en lo concerniente a Dios. Dios es uno, pero las entidades vivientes, tanto las liberadas como las condicionadas, son muchas y tienen diferentes niveles de posición. Las entidades vivientes nunca son iguales a Dios, pero como partes y porciones del Señor son eternamente Sus sirvientes. Mientras las entidades vivientes estén normalmente situadas como Sus sirvientes son felices; de otra manera son siempre infelices. Esta es la conclusión Védica.