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Bg. 8.4

Texto

adhibhūtaṁ kṣaro bhāvaḥ
puruṣaś cādhidaivatam
adhiyajño ’ham evātra
dehe deha-bhṛtāṁ vara

Palabra por palabra

adhibhūtam — la manifestación física; kṣaraḥ — cambiando constantemente; bhāvaḥ — naturaleza; puruṣaḥ — la forma universal, que incluye a todos los semidioses, tales como el Sol y la Luna; ca — y; adhidaivatam — llamada adhidaivam; adhiyajñaḥ — la Superalma; aham — Yo (Kṛṣṇa); eva — ciertamente; atra — en este; dehe — cuerpo; deha-bhṛtām — de los encarnados; vara — ¡oh, el mejor!

Traducción

¡Oh, tú, el mejor de los seres encarnados!, la naturaleza física, que está cambiando constantemente, se denomina adhibhūtam [la manifestación material]. La forma universal del Señor, que incluye a todos los semidioses, como los del Sol y de la Luna, se denomina adhidaivam. Y Yo, el Señor Supremo, representado como la Superalma en el corazón de cada ser encarnado, Me llamo adhiyajña [el Señor del sacrificio].

Significado

La naturaleza física está cambiando constantemente. Los cuerpos materiales pasan por lo general a través de seis etapas: nacen, crecen, permanecen por algún tiempo, producen algunos subproductos, decaen y luego desaparecen. Esa naturaleza física se denomina adhibhūta. Ella es creada en determinado momento, y será aniquilada en determinado momento. El concepto de la forma universal del Señor Supremo, la cual incluye a todos los semidioses y sus diferentes planetas, se denomina adhidaivata. Y presente en el cuerpo junto con el alma individual se encuentra la Superalma, una representación plenaria del Señor Kṛṣṇa. La Superalma se denomina el Paramātmā o adhiyajña, y está situada en el corazón. La palabra eva es particularmente importante en el contexto de este verso, porque con esta palabra el Señor recalca que el Paramātmā no es diferente de Él. La Superalma, la Suprema Personalidad de Dios, que se halla sentada al lado del alma individual, es el testigo de las actividades del alma individual y es la fuente de los diversos tipos de conciencia que tiene el alma. La Superalma le da al alma individual la oportunidad de actuar libremente, y presencia sus actividades. Las funciones de todas esas diferentes manifestaciones del Señor Supremo, quedan claras automáticamente para el devoto puro y consciente de Kṛṣṇa que está dedicado a prestarle un servicio trascendental al Señor. La gigantesca forma universal del Señor, denominada adhidaivata, la contempla el neófito que no puede acercarse al Señor Supremo en Su manifestación como la Superalma. Al neófito se le aconseja que contemple la forma universal, o el virāṭ-puruṣa, cuyas piernas se considera que son los planetas inferiores, cuyos ojos se considera que son el Sol y la Luna, y cuya cabeza se considera que es el sistema planetario superior.